1950, en el Mundial de fútbol de Brasil sucede el Maracanazo.
El campeonato se definió mediante una ronda final de cuatro equipos (Brasil, Uruguay, España y Suecia jugando todos contra todos).
El último partido se convirtió en una final: en el Estadio Maracaná en Río de Janeiro, Brasil, frente a unos 200 000 espectadores, jugó el local (cuatro puntos, producto de dos goleadas frente a Suecia por 7-1 y España por 6-1) vs Uruguay (tres, dado el empate por 2-2 contra España y una victoria 3-2 frente a Suecia).
Los principales diarios de Río de Janeiro ya tenían sus primeras planas impresas celebrando por anticipado el triunfo del equipo local; sin embargo, pese a que el brasileño Friaça anotó el primer gol de la tarde luego se sucedieron los tantos de Juan Alberto Schiaffino y Alcides Edgardo Ghiggia.
Una derrota totalmente inesperada para Brasil, donde la banda de música traída para el cierre no ejecutó ninguna pieza, sin darse cuenta de que la ceremonia de entrega de la Copa Jules Rimet a Uruguay ya estaba ocurriendo.
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