El Calamar volvió a jugar en la cancha del Pincha 23 años después, hoy un Estadio nuevo e impactante, con resultado adverso. Siguen las obras en el club.
El partido arrancó con un claro manejo de los de Zielinski que en los primeros 15 minutos tuvo dos -y hasta tres- chances de marcar el primer gol. Platense, con un esquema táctico hasta el momento nunca usado, tres en el fondo, cinco en el medio, un media punta -Messidoro, que tuvo una clarísima cuando estaba 0 a 0- y un delantero -Pereyra Díaz, una chance también pero en el segundo tiempo-.
Ganó bien Estudiantes, claro dominador del partido ante un desconocido Platense, que parece estar débil de la cabeza y ante el primer gol del rival le cuesta volver al partido y disputarlo. A pesar de que el Calamar tuvo el 58% de tenencia de pelota dispuso de solo tres tiros al arco y un córner en todo el partido. Platense, cuando le hacen el primer gol siente el impacto, se desconcentra y cae el segundo. Pasó con Aldosivi y volvió a suceder con Estudiantes.
No queda mucho para el Calamar, solo sumar en la última fecha para terminar con alguno/os punto/os más. Se viene Rosario -de golear en el clásico y con la moral al tope-, el próximo domingo 9 a las 14.30 hs en el estadio Vicente López. Será la última oportunidad para varios jugadores para demostrar si están para seguir el próximo torneo o no.
En lo institucional, se retiró una columna de publicidad que “molestaba” en el Estadio en la tribuna Goyeneche, siguen las remodelaciones en el Vicente López sumado a la obra del NUEVO estadio de básquetbol, deporte que obtuvo el ingreso a la Liga Nacional -un logro histórico-. Además, las obras en el predio de Benavídez empiezan a tomar color, un sueño a largo plazo que tuvo ya el puntapié inicial -se proyectan allí cuatro canchas de once y lugar de la concentración-.
More Stories
Falta el KO
Por fin entró
Depende de nosotros