Se disputó entre el 1 y el 24 de julio con inicio en Copenhague en Dinamarca y final en París.
El vencedor fue el danés Jonas Vingegaard del Jumbo-Visma, quien logró batir al campeón de las dos ediciones anteriores, el esloveno Tadej Pogačar del UAE Emirates que finalizó en segundo lugar. El podio lo completó el británico Geraint Thomas del INEOS Grenadiers.
El ciclista danés fue aclamado en París como nuevo rey del Tour de Francia, la 109ª edición del Tour, la más rápida de la historia con una media superior a los 42 km/hora, al término de la vigésimoprimera y última etapa disputada con salida y llegada en la capital francesa con un recorrido festivo y monumental de 115,6 km -se impuso en el sprint el belga Jasper Philipsen (Alpecin-Deceuninck)-.
Un triunfo de Vingegaard basado en las etapas de montaña, donde dejó exhibiciones en el Granon y Hautacam. Estas jornadas de lucimiento personal y despliegue de estrategia de equipo, quedaron para la historia.
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