Hacerse cargo

Vélez Sarsfield.

Resiliente triunfo de en la tarde del sábado contra Racing. Tras el paso en falso en Rosario, el equipo de Quinteros demostró que fue sólo un tropezón y se impuso merecidamente a uno de los mejores planteles del fútbol argentino.

El hincha copó el Amalfitani el sábado por la tarde para alentar al Fortín en un partido signado como bisagra, en la pelea por el ansiado campeonato. Racing tenía una última posibilidad de subirse al tren de los candidatos, ya que si vencía a quedaba a cinco puntos. Pese a la oportunidad que suponía el partido, el planteo de Racing fue mezquino y el nivel de sus jugadores paupérrimo. Los de Costas nunca quisieron jugar el partido, se la pasaron tirando pelotazos frontales que los centrales figuras de , Valentín Gómez y Mammana, resolvieron sin dificultades. Juanfer Quinteros (muy bueno cuando ingresa
desde el banco, pero siempre flojo cuando juega de titular) lució errático, imagen del partido que jugó Racing, un grande reducido a tamaño small en la tarde de Liniers.

fiel a su costumbre, salió a buscarlo desde el comienzo. No sin dificultades, logró generar algunas situaciones de peligro en las que fallaba en el pase final y no concretaba. En ese trámite, con dos equipos que no pateaban al arco, se fue el primer tiempo. Quizás ambos conjuntos sufrieron desde lo físico a causa de la fuerza con la que impactaba el sol pleno. Se ve que el Chiqui Tapia no cree en el calentamiento global ni toma sol por las tardes, porque sino solo se explicaría como un acto de malicia poner este partido en el horario de las 15.00 -hecho que sin dudas pervirtió el espectáculo ya que ambos
equipos se notaron visiblemente afectados-.

Racing se ha convertido en un rival extremadamente complejo para . En los últimos diez años, sólo lo había vencido una vez y fue en un partido pandémico. Para encontrar la última victoria de con gente en el estadio había que irse hasta 2012, cuando en el Amalfitani fue victoria con gol de Pratto y a la postre, ese plantel se coronó campeón. Esperemos que esta historia termine igual que aquella vez.

Por lo pronto, hizo los deberes. Lo fue a buscar con más ganas aún y menos nerviosismo en el segundo tiempo. “Hay que hacerse cargo de lo que generamos en la gente”, habían sido las palabras de los referentes del plantel tras la dura caída en Rosario. No casualmente el profe Quinteros no sacó a ningún referente, pese a que Pizzini -por caso- lucía cansado e impreciso, o que Bouzat no ganaba todos los duelos del medio. El DT bancó a los referentes y no los sustituyó, no haciendo caso a los reclamos que ya a los 30’ del segundo tiempo bajaban desde la tribuna. Es que mientras Racing ya había cambiado a medio equipo, Quinteros sólo había realizado un cambio posicional -Elías a la cancha por Ordoñez-. A mi entender, este es el fuerte de Quinteros; saber conducir al plantel, ganarse el respeto de los jugadores, ser la voz de mando. Y los referentes que lucían cansados, le devolvieron con creces la inversión al Profe.

Fue Aquino, quien nunca se escondió durante toda la tarde, el que encabezó la jugada ganadora. Engañó a Nardoni con movimientos corporales que dejaron en ridículo al joven volante de Racing, juntó marcas y descargó en Thiago Fernández, de buen partido; el extremo, en dos tiempos, tiró un centro perfecto y Braian, EL BRAIAN, quién más iba a ser, Romero conectó un cabezazo perfecto y le dio justicia al marcador y a este conjunto de jugadores que no temen a luchar ni a ganar. Como ya fue dicho en estas líneas en columnas anteriores, un grupo de jugadores inteligentes y generosos, que se brindan por
los compañeros y dejan todo en función de un objetivo común; salir campeones del fútbol argentino. Merecido triunfo de .

descansa puntero y con cinco de diferencia sobre sus perseguidores, Talleres y Huracán, quienes se perfilan para ser los animadores de este campeonato. Le viene muy bien al Fortín el parate, ya que tendrá dos semanas para recuperar soldados, esperando sobre todo a Michael Santos, quien le puede aportar recambio al incansable Braian Romero.

Los de Quinteros volverán al ruedo contra River en el Monumental; el mejor plantel del país. Cancha en la que este mismo equipo de sufrió en febrero de este año, una humillante derrota por 5 a 0 que significó un antes y después en la vida de este equipo, comenzando ese día una racha increíble de 18 victorias en 28 partidos, con tan solo 4 derrotas.

Esperemos que le de un golpe de autoridad al torneo; trayendo los tres puntos de Nuñez, los de Quinteros lucirán imparables de cara al sprint final del torneo.