17 marzo, 2025

Un lugar, todas las disciplinas

Lo que el Turco se llevó 

Atlanta 1 Colegiales 0

Atlanta. La Voz del Hincha.

Algunos pueden creer que con este título la nota navegará por los mares turbios del gobierno neoliberal que encabezó un riojano con patillas en la década infame de los 90, que hoy tiene abierta una sucursal en la sede de Casa Rosada. Que iríamos desde la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia; pasando por el encubrimiento al atentado a la AMIA y llegando a la voladura de la fábrica de armamentos de Río Turbio; pero no es así, está lejos de eso. Tampoco, haremos foco en la homónima obra de teatro en formato de revista que protagonizaron en el verano de 2000 en MDQ la dupla taquillera de Artaza y Cherutti. Ya pasaron 25 años de ese estreno, que también contó en su elenco principal con Graciela Alfano, que casualmente tuvo algún affaire con Carlos Saúl. Pero no iremos por esos carriles, aquí haremos referencia a otro Turco, a uno bueno, que a diferencia del otro, hizo feliz a todo un pueblo.

Lo que el Turco se llevó fue un partido malísimo de . El golazo pornográfico de otra galaxia de Nicolás Previtali borró, como si usáramos Photoshop, la falta de juego del equipo. Atrás quedó el penal de dudosa procedencia sancionado, que Bauman se encargó de ejecutar peor que un amateur. En cualquier momento a nuestros nueves le pondrán al lado del dorsal de la patente trasera de la camiseta una letra P de principiante como en los autos cuando hay un conductor novato al frente del volante. Eso mismo, el golón del Turco olvidó lo mal que jugaron nuestros volantes. Aún no sabemos si el Montero que integra el mediocampo se llama Fausto o es Amaia Montero que lideraba a la Oreja de Van Gogh. Igual, no es el único apuntado, varios están nominados a dejar la casa más famosa de Villa Crespo. 

Por la quinta fecha del torneo de la Primera Nacional, hizo home office ante Colegiales y por momentos le costó tener buena conexión Wifi para laburar desde casa. En tiempos de módem, de gigas y notebook, el fútbol del Bohemio se comunicó vía dial-up, usó una Commodoro 64 de PC y su sistema operativo fue MS-DOS. ¡Hasta Internet Explorer anda más rápido que el equipo de García! La victoria 1 a 0 ante el Tricolor no puede tapar los problemas que tenemos para ser tendencia en las redes. Si viviéramos de los goles que hacemos, ya estaríamos en la esquina pidiendo limosna y al igual que al país tampoco nos salvaría un préstamo del FMI, aunque aquí tenemos un sector que lo festeja como el penal de Montiel ante Francia.

Para el choque ante el conjunto de Munro, el míster Luís García, que en este 2025 cambió de look y ya no se pone la gorra, realizó dos cambios con respecto al empate agónico ante Arsenal. Ingresaron Tolosa y Ambrogio reemplazando a Ferracuti y Fedele respectivamente. El primer tiempo que disputaron los 11 ñatos que salieron al campo debe estar en el currículum vitae de los peores 45 minutos de nuestra historia. Puede sonar exagerada esta afirmación, pero con el rival que había enfrente, contando con un penal desde el vestuario y viendo que no pateamos al arco, termina quedando muy corta esa sentencia.

En la primera escapada perfecta del doparti, cuando aún no se habían cumplido dos minutos de juego, nuestro 4×4 de Leo Flores rompió relaciones diplomáticas con la banda y se metió por el Metrobús del terreno hasta que se topó con el “6” de Colegiales. El árbitro pitó afuera, el línea lo chamulló al oído y lo convenció rápidamente vía walkie talkie que había sido adentro. Aquí no entra en tela de juicio la geografía de donde se orquestó la jugada en cuestión, pero la falta abre el debate. La gamba algo estirada del defensor te alimenta a sancionar la infracción, pero hay documentación adjuntada que indica que Flores buscó el choque con el back central. Igual, si en el ascenso habría VAR dudo que al referí lo inviten con un café para que vea la repe en la tele. Son esas jugadas que a diferencia de los campeonatos locales, tienen en las tribunas a las dos hinchadas. Hay quienes alientan porque se cobre la pena máxima y están los del otro bando agitando las banderas de que fue provocado por el atacante. En un país que algunos se ponen del lado opuesto de los jubilados, que celebran con bombos y platillos que repriman a los abuelos y abuelas que cobran miserias, podemos esperar cualquier cosa. Por eso, poco importa de que lado de la mecha estemos en esta jugada, encima Jonatan Bauman se encargó de alejar cualquier polémica en la sala. Remató al medio del arco con la potencia de un bebé recién ingresado a la nursery. Terminó siendo pan comido para el arquero, que trabajó menos que Macri en su vida para detenerle el tirito al “9”.

Si el penal se convertía, iba a oficiar de llave para permitirnos golear en la noche algo lluviosa de Villa Crespo, pero el equipo se quedó con el picaporte en la mano y se olvidó de jugar ese primer tiempo. Se bloqueó y quedó atascado en la puerta giratoria. Además, para completar el combo, Bauman al unísono de malograr el penalti salió lesionado. Aunque aún no queda claro si pidió el cambio por temas físicos o porque le dio vergüenza de como remató desde los 12 pasos. Yo en su lugar ya estaría pidiendo un turno con algún cirujano para que me modifique la trucha. El que lo reemplazó en el terreno fue el pibe que viene de Banfield, Marcos Echeverría, que si durante el encuentro estaba haciendo un casting para ganar terreno, su desempeño fue un tributo a Ivo Constantino, otro “9” que rindió menos que el sueldo promedio de un argentino. 

Después de un primer tiempo que ya anticipamos que fue espantoso, el complemento llegó con una novedad. Luisito comunica que Fausto Montero se queda en el banco. Vi en la platea del León Kolbowski gente destapar botellas de champagne. Un loco, con el fresquito que arrojaba la noche, revoleó la remera y se quedó en cuero festejando la salida del EXperimentado volante. Su reemplazante fue Lautaro Fedele. Igual, podía ingresar Moisés Ikonicoff que la alegría del pueblo Bohemio estaría intacta porque abandonó el grupo de WhatsApp el ya mencionado Montero. De todos modos, el equipo no estuvo en línea, no subió ningún estado, le clavaban el visto y hasta los emojis se escapaban de la pantalla. Jugamos sin crédito en el celular, no teníamos datos para conectarnos a internet y parecía que el gol no llegaría ni aunque nos comuniquemos en paloma mensajera. 

Los mejores del equipo eran Previtali, que en modo pacman copó el medio, jugaba más ubicado que un diplomático en reunión de cancillería. Rago nuevamente fue sostén con sus dos manos emblemáticas para evitar que el rival de turno nos amargue para toda la cosecha, y con una atajada de superhéroe gambeteó una derrota de meme. Y el otro que aprobó con creces el examen fue Ambrogio, verlo andar con la pelota en la cancha inspira ilusión, sabes que algo puede pasar. En un fútbol monótono, de patitos feos, su despliegue de cisne rompe el molde.

El partido ya se estaba empezando a tomar el palo, el hincha había perdido la esperanza (y la paciencia) que la victoria duerma en casa. Atrás, muy atrás, quedó el tiro en el travesaño de Ambrogio, y algunas otras jugadas sueltas que definieron con la misma puntería de un francotirador que sufre de Parkinson. Por eso el lamento era gigante, ya se había igualado ante Arsenal y aunque se empató en el final, el resultado servía lo mismo que abanicar a un cadáver. Imagínense ahora firmando tablas contra Colegiales en el Gran León. Total papelón. Pero a tres minutos del epílogo apareció él, el galán de la mitad de cancha, que como en toda telenovela se quedó con las más linda del barrio.

El melli Bisanz, que volvió a grabar escenas para este culebrón, hizo rapidísimo el lateral. Entraron a tocar por la banda zurda Fedele y Tolosa, como si encarnaran el papel de los amigos del protagonista de esta historia de amor. Fue Tolosa, que Más allá del horizonte por haber jugado un partido de Perla negra, lanzó la pelota rasante para que ubique sin querer queriendo en la lengua del área rival al Turco Previtali, que podía estar un poco Rosa de lejos del arco enemigo, pero el hombre de la noche clavó un gol de otro partido, de otro torneo, de otra categoría, de otra telenovela. Incrustó el balón en lo más alto del ángulo izquierdo de la portería, que ni juntado a Lev Yashin, Chilavert, Buffon y el Pato Fillol podían llegar a esa bola. Golazo pornográfico, asquerosamente sexual el tanto que acababa de fabricar. El “5” de ya era nuestro Arnaldo André, nuestro Osvaldo Laport, Raúl Taibo o el Carlín Calvo del equipo. Y aunque no tengamos de DT a un Alberto Migré, el libreto del partido terminó siendo espectacular. Le pudimos romper el rating a Colegiales con la novela turca. Con ese grito sagrado, Previtali se robó todos los suspiros en la platea del estadio. Por escándalo nacional fue la figura del match. El árbitro debió haberlo autorizado a terminar festejando su golazo en calzoncillos.

Lo que el Turco se llevó fue un partido mediocre de los medios, no estoy haciendo referencia a los de comunicación,que dan pena en el tratamiento de la información y que actúan según el mejor postor. Estoy poniendo el acento en los volantes de . Coronel, Montero y Valdéz Chamorro apestaron. El primero se escondió todo el tiempo y jugó más retrasado que el valor del Dólar (igual, vale aclarar que no está atrasado el billete verde sino lo que esta adelantado son los precios de nuestro Peso) Ya de Montero hablamos antes, ya sé que es de los jugadores fetiches del entrenador, pero su status de privilegio en el equipo de etiqueta pareciera que ya lo está perdiendo. No ayuda en la recuperación y la última vez que metió un pase hacia adelante no existían los veganos en esta tierra. Y de Valdéz Chamorro esperamos mucho más. No volvió como se fue, se lo nota desorientado jugando por la izquierda y es frágil como una copa de cristal a la hora de poner el músculo. Salvo el triunvirato de futbolistas que nombramos hace algunos párrafos, no se rescata a nadie. Por eso se festeja un triunfo sobre la hora, porque jugando para el traste rescatamos 3 puntos de la galera y el bastón de el gran Turco. Fue una definición en homenaje a Diego Armando, que ojalá se haga justicia y el “10” descanse en paz con sus asesinos teniendo sus respectivas condenas. Hablando del verdadero jugador del pueblo, mención de honor para los clubes en su carácter de asociaciones civiles sin fines de lucro (y curro) que permitieron que los ciudadanos y ciudadanas de todos los rincones de Argentina junten todo lo que no usan para dárselo al castigado pueblo de Bahía Blanca. En las malas se ve a la buena gente. Y no fue la excepción, y en su sede social de Humboldt 540 recibe donaciones.

El golazo de la victoria…

La próxima fecha, la sexta jornada de la zona A de la Primera Nacional, jugaremos el lunes 17 del corriente mes también de local ante Los Andes. Al Milrrayitas lo tenemos un punto a bajo nuestro, ellos con 8 y nosotros con 9 unidades. Será otro partido fundamental, a priori más difícil que el disputado ante el Tricolor. Ojalá aparezca el milagro de jugar bien, parece de ciencia ficción viendo como seleccionaron el personal para afrontar esta temporada, pero el simpatizante es el último eslabón que pierde la esperanza. Parafraseando a Pablo Neruda: “Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener a los hinchas” Esperemos que tengamos en el próximo cotejo un tupido fútbol, que florezcan los goles de una vez y que todos juntos festejemos en el botánico estadio de Villa Crespo una victoria tan bella como una rosa o una orquídea.