Sabor agridulce

Racing Club. La Voz del Hincha.

En la cancha de Lanús, debutó en la Copa Argentina y le ganó a Santamarina de Tandil por 2 a 0. Por un lado, un mal partido de , lleno de imprecisiones y falta de apetito. Por el otro, un sorprendente Santamarina, que se le plantó de igual a igual. El equipo de Tandil no se metió atrás; sino por el contrario, lo quiso ir a buscar en todo momento. Tal vez haya pagado caro eso, pero me parece bien que Navarro Montoya los haya parado de esa manera.

Con marcas intensas en el primer tiempo sobre todo, no dejó jugar a y lo forzó al error, (además de los no forzados). Sí, porque de nuevo jugó mal, impreciso, le costó sumar pases y construir algo desde la mitad de la cancha. fue todo el partido una sucesión de fallidos y muchos problemas para controlar la pelota. Por momentos parecía que faltaban ganas de jugar. En condiciones normales, lo podría interpretar como una subestimación al rival, pero viendo los últimos seis o siete partidos de en el torneo local, fue más de lo mismo. Y Santamarina se daba cuenta de que no había tanta diferencia de nivel, entonces se animaba.

Es cierto que no hubo muchas situaciones para los del Federal A, pero jugaron con hidalguía y vergüenza. Creo que se deberían ir más que conformes. Después , ya con el ingreso de Salas, empezó a empujar un poco más, y con un pase -involuntario a mi criterio- para Mura, este define de primera, de zurda y al segundo palo. Un gol que ayudó a tranquilizar esos nervios que atraviesan los equipos de Primera en esta Copa cuando juegan contra el ímpetu de un equipo de menor categoría, que se quiere mostrar y que así puede exponer tus debilidades; y, si te descuidás, eliminarte de la Copa. Nosotros ya sabemos de eso.

Entonces el gol de Mura aportó esa tranquilidad. Pero esto es fútbol, ya sabemos. Después, en el segundo tiempo Santamarina sintió el cansancio. Empezó a mermar en la marca y Almendra pudo jugar un poquito más. Metió un par de sus pases diagonales muy buenos y terminó ampliando la diferencia con un descuido en el fondo de Santamarina; donde Balboa aprovecha, encara, le gana al defensor, se la da a Salas y este remata cruzado para sentenciar el segundo gol de La Academia.

Después generó algunas más para ampliar el marcador. Incluso una de Degregorio sobre el final que pega en el palo y que lo dejó con las ganas de hacer su primer gol en primera. La defensa de de nuevo muy mal, sintió las ausencias en el medio y arriba. Lo voy a decir siempre, faltan refuerzos.

La verdad es que de nuevo los hinchas nos quedamos con ese sabor amargo, porque volvió a jugar mal. Se cumplió con la obligación de ganar, pero no con la de ser superior al rival. Nos hemos puesto exigentes los hinchas, porque somos los campeones de América y no es que seamos desagradecidos, sino que queremos que el equipo siga creciendo, que se consolide, que gane con soltura, que juegue bien y que pelee el campeonato local.

Había que aprovechar la senda del triunfo, mantenerse en lo alto. Y verlo jugar así, nos desconcierta y nos da bronca. Porque sabemos que estos jugadores estácn para más. Mucho más. Esperemos que pronto mejore, que Costas encuentre la manera de rotar y no debilitar tanto al funcionamiento. Veremos qué tiene para aportar Richard Sánchez cuando empiece a jugar.

Vamos y a seguir trabajando para recuperar nivel. La figura: Maxi Salas.