
Barty se quedó con el tercer Grand Slam del año.
La tenista australiana Ashleigh Barty, número uno del mundo, se consagró campeona del Abierto de Wimbledon tras derrotar en la final a la checa Karolina Pliskova (13ª) por 6-3, 6-7 (4-7) y 6-3 en 1 hora y 55 minutos de juego. De esta manera, volvió a festejar en el All England a diez años de su consagración como juvenil.
La final disputada por la australiana fue la primera para una tenista de su país desde que Evonne Goolagong Cawley lo hizo en 1980. La ganadora tuvo un gran primer set, ya que obtuvo los primeros catorce puntos y en apenas 28 minutos se quedó con el primer parcial (6-3); el segundo fue más parejo, Pliskova ganó el tie-break por 7-6 (4) en 49 minutos; sin embargo, en el tercero Barty volvió a ponerse en ventaja rápidamente, se colocó 4-0 y lo cerró con otro 6-3.
Pese a que lidera el ranking desde el 24 de junio de 2019, solo contaba con un título de Grand Slam -Roland Garros 2019-. Luego fue eliminada en Wimbledon (octavos de final) y se quedó sin competir en Australia durante la pandemia de Covid-19; ya en el 2021, ganó tres títulos (Yarra Valley, Miami y Stuttgart), accedió a una final (Madrid), un cuarto de final en el Abierto de Australia y se retiró de Roland Garros por dolores en la cadera.
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