San Pablo Burgos, de España, venció a Quimsa por 82-73 y se quedó con la Copa Intercontinental de la FIBA. Por la pandemia de coronavirus la final se jugó a un único enfrentamiento que se realizó en el estadio de Obras.
Los españoles -ganadores de la Champions League europea, tercer escalón, ya que Euroleague está en conflicto con la FIBA- sacaron en el primer tiempo una ventaja decisiva para luego manejar el tanteador. El conjunto argentino -campeón de Champions League Americas 2020- se puso a seis puntos en el último cuarto y se ilusionó con darlo vuelta; sin embargo, la superioridad colectiva y la jerarquía individual de los europeos lo impidieron.
Los 24 puntos de diferencia que los españoles lograron en la primera mitad (56-32) fueron una distancia inalcanzable para los santiagueños. El brasileño Vitor Beníte (MVP), con 19 puntos, y el norteamericano Thaddus McFadden, con 16, fueron los líderes ofensivos de San Pablo Burgos. Brandon Robinson, con 25, fue el mejor de Quimsa.
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